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jueves, 6 de julio de 2017

SUERTE

No me hables de suerte
No me hables de suerte si nunca
temblaste con un roce.
No me hables de suerte si nunca se
inundaron tus oídos al oír una risa
si nunca cantaste a pleno pulmón
si nunca quisiste de corazón.
No me hables de suerte si depende
de un gato negro o de cristales rotos
de cuchillos afilados.
Grita a la suerte si sentiste que
la sangre corría por tus venas.
Grita si alguna vez encontraste
una conexión.
Háblame de suerte cuando a
tus pulmones les
falte el aire
Cuando las lágrimas que derrames
tengan firma
pero no de sangre.
Mientras tanto, no.
No me hables de suerte
No me hables de suerte si nunca
Conociste gente que
te hiciera sentir así.

Vivo, creo que le dicen.